Cambios Carnavalescos

¿Ven cómo cambian las cosas? En los tiempos de cuando yo era un carajito, pa estas épocas, los miércoles y los domingos salían los “macarao” a dar vejigazos a to el que se les ponía en el medio. Uno le boceaba “¿muchachos que quieren?” y los otros contestaban algo así como “peje y cajón”, nunca supe como era, pero de que los macarao se encojonaban y le caían atrás pa darle un par de vejigazos, funcionaba.


El carnaval, no se llamaba así. Solo que era época de febrero donde salían los macaraos al parque y pululaban por las calles del pueblo buscando víctimas y que terminaba el miércoles de cenizas. Después de esa fecha era época de volar chichiguas y uno se olvidaba de los macaraos hasta el año siguiente.

Ocurre, que a ese grupo de “macaraos” de antaño se le ha dado organización y ahora se le llama el carnaval de Bonao, y el mismo está en franca competencia con los diablos cojuelos de la Vega. La compañías cerveceras le han puesto un “tro” de cuartos a estos eventos y en vez de andar por el pueblo, lo macaraos están en un sitio. Es una pena, porque antes, en la avenida Columna, frente al liceo, siempre se enfrentaban a latigazos limpios los lechones de Santiago con los diablos de la Vega, estos se daban un “jumo” de Siboney y estaban los fuetazos a “do por chele”. Ahora nuestro carnaval no tiene “violencia”. Estos eran los únicos que bebían en demasía en el carnaval. El pueblo, se la pasaba andando de calle en calle siguiendo los macaraos en su “caza de carajitos voceadores”.

Yo creo que fue la gente vieja que se inventó estos cambios, porque como no pueden caerle atrás a un grupo de locos llenos de cascabeles y espejitos redondos, por el pueblo, ahora crean el “carnaval” este y los obligan a todos a ir a verlos a ellos beber como locos.

Me pregunto ¿como disfrutan los carajitos de Bonao ahora? El carnaval ya no es para ellos.  El carnaval es para los promotores, los organizadores, los borrachones y los “visitantes” de todo el pais que van a gozarse la “tradicion” Bonaense.

Y sobre la violencia, antes, los macaraos tenían que salir a buscarnos por el pueblo pa darnos los vejigazos, ahora, las mujeres y niños van en fila india a llevarles sus nalgas pa que los macaraos, paren de darse un trago y les “jinchen el culo” a tablazos.

Que guto ma pendejo ese!

No ombe! Los cambios como estos, son una mierda!