El Estrallón (los de bien hablar dicen estrellón)

Estando en plena fiesta de cumpleaños de Marco Andres, me arreglaba para una foto en familia, cuando de pronto… me movieron el piso y perdí el equilibrio. Intenté agarrarme de Nickito pa no caer como una guanabana, pero el desgraciao quitó (con toda intención) su pata y Rian, Plan, Pum, platán!!! cai patas pa’rriba, pero como buen caedor, puse mis manos y no me “agorpie” de mal manera porque dios es grande. Gracias a dios que nadie estaba grabando, porque un video de eso en el internet me hubiera obligado a retirarme pa’siempre de las redes sociales.

Ya en mi casa y recordando todo, me he reido sin parar, porque el matazo fue bueno, de pelicula!

Despues de todo, tuve que irme a beber con to’los primos para olvidar. Olvidé bien, porque solo me acordé hoy cuando no queda ningun vestigio de ron en mis venas. Escribo esto, porque no quisiera yo que el cuento lo diga otro y ponga la vaina mas jocosa de lo que es y despues nadie se olvide del estrallón en los muchos años por venir.