He estado enfermo en estos días. Me agarró una bronquitis que tardó mucho en sanar. Tambien, recientemente, un apreciado Primo-tío ha sido diagnosticado con una enfermedad peligrosa, y ahora inicia su largo proceso de tratamiento para vencerla. Estar enfermo es una mierda.
Este ultimo caso me ha llevado a reflexionar sobre la razones por las cuales las convalecencias de personas que queremos tanto, nos afectan, de particular manera y terminamos siempre preguntándonos porque razón ocurren cosas tan malas a personas tan buenas. Y nos enojamos.
A este familiar le quiero de manera especial. El donó su sangre cuando mi padre estaba muy enfermo y la necesitaba de urgencia. Tal acción casi le cuesta la vida, pues tuvo una mala reacción al procedimiento. Ese gesto habla mucho de lo bueno que es y lo agradecido que siempre estaré por su desprendimiento para con mi difunto padre. Praticamente estoy unido por sangre, dos veces con él.
En casos como estos, si hacemos lo correcto -visitamos buenos médicos y cumplimos con las terapias mas exitosas para combatir dichos males- es más probable que mejoremos y en muchos casos curemos.
Mi familiar ha hecho todo lo correcto, se diagnosticó con varios medicos y se aseguró, que todos coincidieran en lo que le aflige y en el tratamiento mas adecuado para su caso. Está siendo tratado por lo mejor que hay en medicina en este pais. Ademas tiene una fuerte fe en Dios y una creencia autentica en su poder. Tremenda conbinacion para su curación: ciencia y espiritualidad.
No me siento muy cómodo cuando algunos solo agradecen a dios que la terapia este funcionando, pues, yo, que tengo una mente súper inquísitiva, me pregunto ¿a quien condeno por haberle dado tal aflicción?
Muchos dirán, eso no viene al caso. No se puede empezar a batallar una enfermedad con tal negatividad. Pero... ¿no le mueve la razon para preguntar si fue dios que le dio esta enfermedad, ahora que busca cura con la medicina, quien se lleva las loas y los laureles es un personaje espiritual, que si de verdad existiera, no debió darle tal aflicción a persona tan buena?
Perdonenme mis queridos lectores, pero no podia dejar pasar dicha dicotomía.
Yo, tanto como los demás envueltos en este drama, deseo de todo corazón que mi familiar se recupere lo antes posible. En ese tenor, he visto que la fe que tanto él, como muchos de sus allegados, destilan, pudiera ser beneficiosa para su recuperación. Tener buen ánimo y creer que va a sanar es el primer paso importante para sanar. Por lo tanto no tengo ninguna opinion sobre clamar por una solución espiritual. De ser necesario participaré gustoso en cualquier ritual que me pida, si el cree que de verdad eso seria beneficioso. Pero si criticaré, si cualquier actividad –por bien intencionada que sea- le aleja de seguir tratamiento medico para lograr la cura.
Si vamos a ser agradecidos, Parafraseemos a Jesuscristo cuando dijo que le demos a dios lo que es de dios (la fé de que será curado, el entusiasmo, la buena disposición, el buen animo y el deseo de luchar –yo añadiría la enfermedad tambien-) y a Cesar lo que es de Cesar (la medicina, la ciencia, el cuidado y la mejora, por supuesto); Y juntos lograremos lo que todos deseamos: la curación.
Y habrá curación. Porque de lo contrario, estaré muy enojado. Y no habrá quien aguante mi boca, en los juegos de dominó, por los siglos, de los siglos. Amén.
Quiero dedicar a mi querido Tio-Primo este poema de Mario Benedetti, que se llama Hagamos un trato, para que sepa que en estos difíciles momentos estaremos a su lado para lo que nos necesite.
Compañero
usted sabe
puede contar
conmigo
no hasta dos
o hasta diez
sino contar
conmigo
si alguna vez
advierte
que lo miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o tal vez porque existe
usted puede contar
conmigo
si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué es flojera
igual puede contar
conmigo
pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no ya para que acuda
presuroso en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.
Que te mejores pronto, Es mi gran deseo!!!!