He hecho en estos días una auto-revisión, una introspección a mi ser. A ver si me equivoque, y, de ser así, determinar donde todo se torció, pues según con los que me junto, he cambiado.
Y después de haber encontrado mi respuesta he querido escribirla, solo para leerla de cuando en veces.
Muchos concluyen que como me he vuelto tan "beligerante" ya no soy una buena persona. En realidad sigo siendo el mismo. Sigo queriendo a quienes me quieren. Sigo con el corazón lleno de amor. Sigo siendo "inteligente", pero irreverente.
Respeto mucho a quienes se rinden en su creencia en dios y le aman. Aunque lo considero platónico y no mi tipo de amor, lo respeto.
Solo, que hace un tiempo a acá he iniciado un viaje que me lleva a estar mas en sintonía con el universo, tal vez es porque ahora entiendo mas el universo. El conocimiento me ha liberado de las ataduras de la hipocresía, pues no tengo que ser hipócrita frente a la gente, aparentando ser una persona que en mis adentros no soy. Un persona que calla para no hacer sentir mal con quien comparto, aunque piense de manera muy diferente.
Ocurre que, el conocimiento me ha enterado de lo finito de la vida y lo urgente que es hacer algo que valga la pena por haber vivido. Creo que cada palabra que he escrito me acerca a esa meta y realmente no culpo a nadie por esto. No estoy enojado con nadie.
Estoy enamorado de mi familia, creo que lo han notado. Es una bonita familia, los Paulinos. Y yo soy parte de ella y aunque no doy gracias a ningún dios por ello, si doy gracias al universo por haber, en este breve momento del tiempo, colapsado estos átomos, estas moléculas en un cuerpo que tiene una red compuesta por personas fascinantes y diversas.
He nacido, he crecido, he proveído esta masa ingente de átomos, con conocimientos por muchos deseados, he leído libros, he pintado cuadros, he tocado una guitarra, he compuestos poemas y escrito un libro. Amaestre el karate y disfruto el sushi. He crecido y me he multiplicado. He dado a la humanidad dos personas que creo serán grandes y le ayudaran a ser una mejor humanidad. Y he amado de vez en cuando. También sueño a diario antes de dormirme, en reinos, mundos y cosas interesantes que descubriré.
Entonces, ¿que puedo decirles que no les haya dicho antes?
¿Feliz Navidad? No, esa tradición es en estos días muy banal e irrelevante.
No les diré nada nuevo... Solo que estoy bien.
Aunque no tengo a un dios ni religión que rijan mi vida, que ocupen mi tiempo y me obliguen a participar en ceremonias aburridas. Ni una Biblia que me diga lo que es bueno o malo. Eso lo he averiguado por mi mismo
.
No se preocupen. Estoy bien...
Eso sí, pasmado con lo hermoso que es el universo, orgulloso, porque lo entiendo y decepcionado de no haberlo descubierto antes.
Y después de haber encontrado mi respuesta he querido escribirla, solo para leerla de cuando en veces.
Muchos concluyen que como me he vuelto tan "beligerante" ya no soy una buena persona. En realidad sigo siendo el mismo. Sigo queriendo a quienes me quieren. Sigo con el corazón lleno de amor. Sigo siendo "inteligente", pero irreverente.
Respeto mucho a quienes se rinden en su creencia en dios y le aman. Aunque lo considero platónico y no mi tipo de amor, lo respeto.
Solo, que hace un tiempo a acá he iniciado un viaje que me lleva a estar mas en sintonía con el universo, tal vez es porque ahora entiendo mas el universo. El conocimiento me ha liberado de las ataduras de la hipocresía, pues no tengo que ser hipócrita frente a la gente, aparentando ser una persona que en mis adentros no soy. Un persona que calla para no hacer sentir mal con quien comparto, aunque piense de manera muy diferente.
Ocurre que, el conocimiento me ha enterado de lo finito de la vida y lo urgente que es hacer algo que valga la pena por haber vivido. Creo que cada palabra que he escrito me acerca a esa meta y realmente no culpo a nadie por esto. No estoy enojado con nadie.
Estoy enamorado de mi familia, creo que lo han notado. Es una bonita familia, los Paulinos. Y yo soy parte de ella y aunque no doy gracias a ningún dios por ello, si doy gracias al universo por haber, en este breve momento del tiempo, colapsado estos átomos, estas moléculas en un cuerpo que tiene una red compuesta por personas fascinantes y diversas.
He nacido, he crecido, he proveído esta masa ingente de átomos, con conocimientos por muchos deseados, he leído libros, he pintado cuadros, he tocado una guitarra, he compuestos poemas y escrito un libro. Amaestre el karate y disfruto el sushi. He crecido y me he multiplicado. He dado a la humanidad dos personas que creo serán grandes y le ayudaran a ser una mejor humanidad. Y he amado de vez en cuando. También sueño a diario antes de dormirme, en reinos, mundos y cosas interesantes que descubriré.
Entonces, ¿que puedo decirles que no les haya dicho antes?
¿Feliz Navidad? No, esa tradición es en estos días muy banal e irrelevante.
No les diré nada nuevo... Solo que estoy bien.
Aunque no tengo a un dios ni religión que rijan mi vida, que ocupen mi tiempo y me obliguen a participar en ceremonias aburridas. Ni una Biblia que me diga lo que es bueno o malo. Eso lo he averiguado por mi mismo
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No se preocupen. Estoy bien...
Eso sí, pasmado con lo hermoso que es el universo, orgulloso, porque lo entiendo y decepcionado de no haberlo descubierto antes.