Los dominicanos se imaginan las excusas mas ingénuas y estúpidas para justificar gastar dinero en juegos de azar. He creado este encuentro "ficticio" para explicar a qué me refiero:
- El tipo: Me soñé contigo.
- Yo: Anja! ¿Y qué te soñaste?
- El tipo: Que venias corriendo y me dabas una funda llena de dinero.
- Yo: Coño! Que buen sueño. Lejos de la verdad, porque si tuviera una funda llena de cuartos, no se la daría nadie. Perdóname la sinceridad.
- El tipo: No, solo te lo menciono para que me des el número de tu cedula, que quiero jugar un palé de loteria. Ese sueño era un mensaje pa'que me hiciera de unos chelitos.
- Yo: No jodas! Y de ¿dónde sacas que el sueño ese te dice que juegues lotería? Yo creo que es una excusa para alimentar tu vicio.
- El tipo: Hermano, no me psicoanalice, ¿me va a dar la cedula sí o no?
- Yo: Diablo! Pero no es para tanto! Mi numero termina en 99 (es en 98, pero yo ya estaba en modo de joder)
- El tipo: Gracias mi hermano!
AL OTRO DIA:
- El tipo: Mierda Tullidor! Por poco me saco la loto, jugué el 99 y salió el 98.
- Yo: Talves leíste el Sueño mal. ;>)
Pero para no coger la cosa muy en serio aquí les dejo a Calderón de la Barca y un extracto del guión de una de sus obras (siempre llenas de pesimismo) "La Vida Es Un Sueño". Esto lo dijo el Príncipe Segismundo al final del segundo acto después que su padre le regresó al calabozo inmundo haciéndole creer que lo que vivió como principe fue un sueño cuando en verdad fue realidad.
Tambien he añadido un link para un video de mi cantante favorito donde interpreta una cancion relacionada con el tema de este articulo: "Sueño de una noche de verano". Disfrútenlos ambos: Link al video de la canción.
La Vida Es Un Sueño:
Es verdad; pues reprimamos
esta fiera condición,
esta furia, esta ambición,
por si alguna vez soñamos;
y sí haremos, pues estamos
en mundo tan singular,
que el vivir sólo es soñar;
y la experiencia me enseña
que el hombre que vive, sueña
lo que es, hasta despertar.
Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe,
y en cenizas le convierte
la muerte, ¡desdicha fuerte!
¿Que hay quien intente reinar,
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte!
Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en este mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.
Yo sueño que estoy aquí
de estas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ficción,
una sombra, una ilusión,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.